8M: Sin igualdad no hay democracia. Ni un paso atrás en la ampliación de derechos

A 40 años de la recuperación de la democracia en Argentina, mujeres y disidencias socialistas de todo el país nos preparamos para un nuevo 8M, para ampliar las historias y consignas de lucha: como viene sucediendo hace mucho tiempo, hacemos oír nuestras demandas de igual salario por igual trabajo, del reconocimiento del trabajo de cuidados, del derecho a vivir una vida libre de violencias, y a la participación política sin violencia y en forma paritaria y plena. Millones de voces  en las calles marchamos para construir un nuevo sujeto político para un nuevo tiempo de la democracia Argentina. 

Han pasado más de cien años desde que las Mujeres Socialistas en Copenhague decidieran celebrar, en 1910, el Día Internacional de la Mujer Trabajadora. Como así también las luchas de las sufragistas, revolucionando sus tiempos, levantaban dos reivindicaciones principales: el voto femenino y el fin de la esclavitud sexual.

No es un marzo más, sino un hito en la historia democrática de nuestro país que nos permite reflexionar sobre las nuevas estrategias para asegurar lo ganado y avanzar en ciudadanías activas con pleno goce de derechos, es decir justicia social y equidad, sin la cual no habrá desarrollo ni democracias. Por eso insistimos que para más y mejor democracia, necesitamos más feminismo. 

En el marco de la pandemia y la post-pandemia, las brechas económicas se han agudizado y se ha profundizado la desigualdad; donde unos pocos son dueños de la mayor parte de la riqueza y las mayorías viven en situación de vulneración en sus derechos esenciales: trabajo, vivienda, tierra, ciudad, servicios, infraestructuras, conectividad y seguridad, entre otras. Esta realidad impacta de manera dramática entre las mujeres, quienes asumimos las tareas de cuidado en porcentajes crecientes. Como venimos sosteniendo año a año, la deuda es con nosotras.

En este contexto de crisis económica, la feminización de la pobreza en Argentina y la brecha salarial, en el 2022 alcanzó el 27%. Mientras los varones destinan solo el 30% de su tiempo de trabajo no remunerado a las tareas de cuidado, las mujeres destinamos el 70%. Y éstas representan una de las mayores causales por las cuales  estamos subempleadas, precarizadas o fuera del mercado de trabajo (Fuente: Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), Observatorio de Igualdad de Género de América Latina y el Caribe (OIG). 

Tenemos hoy una gran certeza, las mujeres somos las cuidadoras de la humanidad, sin embargo, el trabajo doméstico y de cuidado que se hace en los hogares de manera gratuita ( bajo la idea de que le corresponde, por solo su condición de mujer), y por ende, esa tarea, sigue siendo devaluada y no reconocido; a causa de ello, la mayoría se desempeña en el mercado informal para poder subsistir; las violencias hacia las mujeres aumentan y se complejizan, llegando a los feminicidios. Y una justicia que no llega, mientras que pedimos en las calles por una reforma judicial feminista, se produce un femicidio cada 36 hs.

En este mundo de contradicciones, de inadmisibles desigualdades políticas, las mujeres son omitidas bajo supuestas neutralidades, diluyéndolas en el concepto de familia, hogares, población. Una sociedad cada día más violenta con prácticas de odio  que crecen y terminan alejándonos de lo público y de nuestro legítimo derecho a la representación política, ¿Qué tipo de democracia puede pensarse para los próximos 50 años si no estamos allí para construirla?. Si de ampliación de derechos hablamos, la conquista de la ley de paridad no se garantiza para los cargos electivos provinciales de Tucumán y Tierra del Fuego, y aún existen grandes complicaciones en aplicar el concepto de paridad en concejos deliberantes y parlamentos uninominales. En un nuevo tiempo para la Argentina el desafío es la democratización paritaria del poder, en todos los ámbitos de la vida.  

Los feminismos  reconocen a las mujeres y a las personas LGBTIQ+ en sus diversidades étnicas, raciales, etarias, de identidades sexuales, con discapacidad, y -no menor- del lugar donde habitan, sus condiciones, resaltando aquello que se trata como si fuera cosa de minorías siendo que forma parte de las mayorías.  Sin tutelajes y con paridad. Mujeres y Disidencias en las listas con plataformas claras y precisas sobre las propuestas de todos los candidatos, frente al antifeminismo también nos paramos. Sin igualdad no hay democracia: ni un paso atrás en la conquista de derechos.

Este 8M alzamos la voz para que sea escuchado por el Estado, los partidos políticos y la sociedad Argentina en su conjunto, salimos a las calles y marchamos por:

💜Derecho a vivir una vida libre de violencias, en paz y con justicia.

-Exigimos declarar Emergencia Nacional. Más presupuesto y el rediseño de políticas públicas basadas en la participación ciudadana. Se registra 1 femicidio cada 36 hs en Argentina y fueron al menos 4.015 los huérfanos por femicidios en los últimos 15 años, según los datos recopilados por las organizaciones la Casa del Encuentro y el Observatorio Lucía Pérez hasta el pasado diciembre.

-Cese de la cultura del odio. Repudiamos las fuerzas políticas que promueven el odio y discriminación y condenamos sus prácticas. Exigimos que el estado genere acciones concretas para mitigar y proteger a las mujeres víctimas de campañas de odio que implican el hostigamiento y el alejamiento de la vida pública poniendo en riesgo la participación política. 

-Ley antidiscriminatoria. Basta de estigmatización y el prejuicio hacia las identidades de género. Necesitamos una ley antidiscriminatoria que garantice los derechos de todas las personas, sin importar su orientación sexual o identidad de género.

Queremos la aparición con vida de Tehuel, en democracia no hay lugar para desaparecidos ni crímenes de odio. 

-Cumplimiento efectivo ILE y ESI, exigimos se territorialicen y se monitoreen el efectivo cumplimiento de las leyes. Rechazamos la persecución penal a las personas con capacidad de gestar y mujeres que abortan y a quienes las atienden y asesoran. 

💜Derecho a cuidar y ser cuidadas

-El reconocimiento del cuidado como trabajo. Exigimos el tratamiento de los proyectos de Ley Sistema Integral y Federal de Cuidados presentado el 8 de marzo del 2022 por la Diputada Nacional Mónica Fein. Ley Licencias Parentales presentada por el Diputado Enrique Estévez y Ley de acceso de las familias monoparentales a la asignación de la Ley 24.714

-Publicar y difundir datos estadísticos de las mujeres y disidencias con discapacidad abocadas a tareas de cuidado. Sin datos no hay visibilidad ni diseño efectivo de políticas públicas. 

La garantía del derecho de las mujeres a cuidar y ser cuidadas debe incluir una perspectiva interseccional que atienda las necesidades y demandas de mujeres adultas, mujeres de comunidades originarias, diversidades étnicas, religiosas, etc.

💜Derecho a un trabajo decente y desarrollo económico en equidad.

-La igualdad de derechos y oportunidades laborales, trabajo digno, educativas, políticas, sociales, culturales. Presupuestos reales con perspectiva de género en todos los Ministerios que promuevan la inserción laboral y su permanencia con derechos. Ambientes laborales libres de violencia, es necesario y urgente avanzar con las recomendaciones del convenio 190 de OIT suscripto por Argentina hace dos años.

-Reconocimiento de derechos laborales y actualización con perspectiva en género de los convenios colectivos de trabajo, que aseguren en cumplimiento de las licencias, los espacios de cuidado y las medidas que resguarden los derechos consagrados en la ley de trabajo.

-Políticas públicas de transición justa es el marco de acción propuesto por la Organización Internacional del Trabajo y la Convención de Naciones Unidas contra el cambio climático, para maximizar beneficios en la actividad y el empleo, y minimizar los impactos negativos de la transición ecológica y la descarbonización. Con un compromiso medible con el cambio de la matriz energética que disminuya desastres ambientales de los cuales las mujeres son las primeras afectadas y las más resilientes.

-Exigimos el efectivo cumplimiento del cupo laboral para personas con discapacidad del 4 % para todas las reparticiones del Estado, así como también espacios laborales accesibles -sin barreras-, que permitan el trabajo decente para mujeres y disidencias con discapacidad.

-Políticas públicas que contemplen a mujeres y disidencias con discapacidad como parte de la población económicamente activa.  La tecnología y las competencias digitales son fundamentales en el mercado laboral actual y futuro. Promover la participación de mujeres con discapacidad en estas áreas significa un paso importante para lograr la igualdad de género.

Políticas concretas para el desendeudamiento: proponemos un Programa Nacional para promover la igualdad de género en materia económica, favoreciendo la situación de las mujeres vulnerables que tienen deudas con entidades proveedoras de créditos.

Fondo de asistencia de cuota alimentaria que la garantice en los casos de incumplimiento de los progenitores.

-Acceso a las prestaciones de seguro por desempleo para trabajadoras de casas particulares y reconocimiento de antigüedad de los años de trabajo no registrados. 

-Cupo laboral trans, efectivo cumplimiento en el sector público y políticas públicas de fomento a la inserción laboral en el sector privado.

-Moratoria previsional para mujeres Trans mayores de 40 años y Reparación Histórica a mujeres Trans víctimas de la Dictadura Militar.

-Ley Integral Trans- la igualdad no es un privilegio. Exigimos la sanción de la Ley Integral Trans para poder garantizar el acceso a políticas públicas, el acceso a la educación, el trabajo, a la salud integral, garantizar el acceso a la justicia, a la vivienda y a la reparación histórica.

💜Derecho a la ciudad, la vivienda los servicios y un medio ambiente sostenible

-Queremos ciudades ( sin discriminación por motivos de género) seguras y transfeministas que defiendan el derecho del acceso a la ciudad y la vivienda para todos, todas y todes; que garanticen el acceso a la tierra, la vivienda y los servicios, que promuevan el encuentro y el fortalecimiento de redes para la incidencia política, y los espacios públicos plurales y sin violencias.

Ley de humedales: pensar en clave feminista como un nuevo paradigma para repensar las relaciones humanas, el cuidado de las personas y la naturaleza, la vida doméstica y cotidiana en relación a la productiva.

💜Derecho a una plena participación política -democratización de la vida.

-Paridad en todos lados. No alcanza con hablar de paridad política, no es lo mismo democratizar la política que democratizar el poder. Avanzar en la participación paritaria 50 / 50 en todos los cargos de toma de  decisión  públicos y privados.

-Cumplimiento de la Ley de paridad en todo el territorio nacional, aún existen dos    provincias sin leyes provinciales: Tucumán y Tierra del Fuego. 

-Que la paridad figure en los estatutos de las centrales sindicales. 

-Presupuesto para políticas públicas que garanticen la formación y participación  política partidaria, sin financiamiento el desarrollo de actividades de líneas internas, grupos y espacios de mujeres en cada partido se convierte en un factor de desigualdad.

-Protocolos contra la violencia y discriminación para los partidos políticos obligatorio y Ley Micaela como requisitos para cualquier candidato y candidata. Para que el ejercicio del poder sea libre de violencias. 

-Impulsar compromisos políticos partidarios de presentación de listas libres de   candidatos acusados por violación, abusos, y cualquier tipo de violencia contra las mujeres. 

 

 

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